jueves, 23 de marzo de 2017

¿Lo ilegal es mejor, Uber o taxis legales?

Lo primero que uno piensa cuando dicen Uber es que son precios más bajos y menos tiempos, pero en lo general lo barato al final cuesta caro. Estos taxis piratas tienen una aplicación para smartphones muy moderna, eso es lo que les falta a nuestros taxistas establecidos modernizarse. Para atender a las personas, para llamar o solo pedir estos vehículos particulares, con pilotos que no tienen la experiencia suficiente, pues  un piloto de taxi negro-amarillo, debe tener como mínimo dos años de antigüedad con clase B y además  hacer un curso de conductor profesional, en cambio en Uber u otra aplicación no, incluso puede ser un joven que tenga recién su licencia de conducir, pues lo importante es tener un auto que incluso no sabemos en qué condiciones esta pues un taxi legal tiene revisión técnica cada 6 meses, a diferencia a un vehículo particular que su revisión es cada 12 meses, que pasa si este vehículo pirata falla dentro de los 5 o 9  meses, por ejemplo.  
Como sucede en prácticamente todos los países donde Uber opera, el conflicto con los taxis tradicionales tiene en buena parte que ver con la regulación de transporte existente. Por tratarse Uber y Cabify de un servicio nuevo e ilegal, esas regulaciones no cubren su utilización y es normal que los servicios de transporte más tradicionales se vean amenazados ante su presencia. Hasta la fecha el ministerio de transporte no ha legalizado a Uber y por lo que dicen los taxistas: Uber viola las regulaciones de la ciudad sobre transporte privado y de alquiler. Pedimos a la Corte que ordene a Uber cesar su actividad hasta que cumpla con las ordenanzas de seguridad, salud y protección del consumidor”, cosa que no ha sucedido y nuestras autoridades aún no hacen nada, rara la situación, porque a taxista regulados siempre transporte los está sondeando e inspeccionando sus papeles e inclusos neumáticos, extintores y otros.
El subsecretario de Transportes, Cristián Bowen, explica que Uber y Cabify, otra de las empresas que presta este servicio, no están inscritas en el Registro Nacional de Servicios de Transporte Público de Pasajeros (vehículos cuyos cupos deben ser licitados), “por lo que son considerados como servicios informales”, entonces ¿por qué aceptamos estos servicios? Tan mal están nuestras regulaciones. La verdad no comprendo, si algo es ilegal se debe suspender o supervisar.  
Lo que dice T13 sobre Uber: “En el país se ingresó el proyecto que busca regular el uso del servicio, desatando la ira de los transportistas tradicionales, provocando peleas y destrozos de vehículos, hacia ambos lados. Esa situación ya se ha repetido en casi todas las ciudades del mundo a las que ha llegado la aplicación” yo puedo justificar esta ira pues los taxistas legales deben pagar su patentes que están carísimas, sus seguros incluso para pasajero (cosa que uber no tiene), revisiones técnicas más seguidas, supervisiones constantes, y otros. Entonces que vengan personas que le quiten el pan de cada día es injusto y claro provoca ira. Por ahí he escuchado que existen pésimos servicios de taxis techo amarillo, pero como en todo lado hay cosas buenas y malas, y no por unos pocos vamos a echarlos a todos en un mismo saco, tengo la posibilidad de que mi padre es taxista y nunca a recibido una queja de algún pasajero y sé que él es muy amable con sus pasajero y que con mucho sacrificio paga las letras de su taxi totalmente legal. Por consiguiente existen empresas muy ordenas y buenas, taxistas muy educado y con buenos servicios, existen vehículos cómodos y seguros.
Por conclusión, Uber o Cabify son vehículos que transportan a personas ilegalmente, ellos violan las regulaciones de la ciudad de donde están  transportando personas y aunque sean más baratos, son ilegales.
Ailyn Constanza Acuña Miranda  8°B 2016.